El presidente de Uruguay se quejó por las continuas trabas al comercio. Además, desde el Ministerio de Desarrollo de Brasil dijeron estar «preocupados»
Desde que asumiera Cristina Fernández de Kirchner su segundo mandato, rápidamente comenzaron a multiplicarse las medidas para frenar a las importaciones, tendientes a sostener el empleo y a evitar una «fuga» de dólares por el comercio.
Así, los principales socios del Mercosur comenzaron a mostrar su inquietud por esta catarata de instrumentos que buscan «blindar» las fronteras.
«Hoy todos sabemos que la Argentina ha adoptado una política interior que nos gustará o no pero es su política democrática, de su gobierno elegido. Que tiene un proteccionismo y que tranca el intercambio comercial», se quejó en declaraciones a El País el presidente de Uruguay, José «Pepe» Mujica.
El mandatario uruguayo alegó que «la política exterior con la Argentina debe ser cuidadosa para proteger al turismo».
«Esto es una de cal y una de arena», graficó Mujica, quien acotó que «Punta del Este no existiría si no fuera por ellos», en alusión a los turistas argentinos.
En este contexto, con la convicción de que las «medidas proteccionistas» que impone Argentina al comercio «van a perjudicar» en lo comercial a Uruguay, el gobierno de ese país está saliendo a buscar apoyo en otros socios regionales, según dijo a El Observador el presidente José Mujica.
Ese es el principal motivo del viaje que el mandatario realizará hasta el domingo a la Antártida junto con el presidente chileno, Sebastián Piñera.
«Sé que Chile no nos va a servir para sustituir el comercio con Argentina, pero quiero conversar para generar más mercados y gestionar una salida al Pacífico», dijo Mujica.
Pero ese no es el único destino al que apuesta el mandatario. También piensa viajar a Perú y a Brasil. «Hay que ir tejiendo», agregó.
Asimismo, el nuevo control a las importaciones adoptado por Argentina, causó «preocupación» en el gobierno brasileño, por lo cual el Ministerio de Desarrollo, Industria y Comercio Exterior (MDIC) de ese país «estableció contacto con el gobierno argentino para evaluar mejor los posibles impactos para los exportadores brasileños» de bienes de consumo.
Así lo consignó el organismo en una nota, según publicó el diario O Estado de Sao Paulo.
La nueva «sintonía fina»
la «sintonía fina» entre las empresas importadoras para asegurar la plaza de billetes verdes es cada vez más precisa y quirúrgica:
• Primero, se reforzó el uso de las licencias no automáticas, el mecanismo con el que el Gobierno llega a retrasar durante más de 180 días el ingreso de productos al país.
• Luego, durante todo diciembre, les exigió a las compañías que frenen importaciones y demoren los pagos a sus proveedores en el exterior para así evitar la salida de dólares por la vía comercial.
• Paralelamente, se creó la Secretaría de Comercio Exterior, con Paglieri al frente, una aliada de Guillermo Moreno, a esta altura, devenido en el «ministro de la sintonía fina» y el «guardián de las fronteras».
• Ante el recrudecimiento de la crisis, la funcionaria logró que el Mercosur acordara ampliar la lista de excepciones al Arancel Externo Común y aplicar por un año una tasa del 35% a productos comprendidos dentro de 100 nuevas posiciones arancelarias.
• Posteriormente, la AFIP, a través de una resolución publicada este miércoles en el Boletín Oficial, creó el régimen de Declaración Jurada Anticipada de Importación (DJAI), que regirá a partir de febrero. La misma obliga a los empresarios a informar qué productos se estarán importando y de qué origen, antes de concertar la orden de compra con el proveedor de afuera.
Fuente: iProfesional
