Fuente: iProfesional

La orden de certificar documentos bancarios para destrabar mercaderías y divisas quedó suspendida; tras un «piquete» de despachantes, los funcionarios estudian cómo instrumentar legalmente esa medida

Por Juan Pablo De Santis

El subdirector general de Control de Aduanas, Silvio Minisini, confirmó este miércoles a despachantes que la AFIP ya está trabajando en una norma para incrementar los controles de las importaciones.
Sin comunicación previa, el Sistema Informático María (SIM) de la Aduana bloqueó este miércoles todos los despachos de importaciones al exigir «copia certificada de toda la documentación bancaria involucrada en la transacción» para poder liberar la mercadería de los puertos. Literalmente se habían frenado todas las importaciones.

La medida causó revuelo entre lo importadores; a las 2:30 pm cerca de 200 empresarios y despachantes se autoconvocaron en el tercer piso de la Aduana para reclamar y exigir explicaciones. Allí fue cuando apareció el funcionario que anunció que » la medida quería sin efecto » hasta tanto «salga la instrucción por escrito».

Minisini generó una reunión improvisada con los despachantes que había concurrido en un pasillo de la Aduana, donde sin micrófono y a viva voz, confirmó que la certificación que se pedirá a importadores para ingresar productos deberá tramitarse a través de un expediente aduanero (llamado SIGEA) y demandará una constancia vía fax, correo electrónico, certificado de importación o de despacho o bancario para explicar ante las autoridades de qué modo se iba a efectuar el pago.

Ante los gritos e insultos, Minisini aclaró que por el momento no estarían bloqueadas las importaciones hasta que se formalizara la norma y que la necesidad futura de presentar un expediente adicional para importar podría ser condición para liberar la mercadería y para que luego la AFIP analice la documentación.
La información fue confirmada a LA NACION por dos grandes despachantes de aduana independientes que la escucharon de boca del funcionario. La medida llega en un contexto en que la AFIP intensifica los controles para detener la salida de divisas del país y la fuga de capitales.

Esta regulación que debutó en el sistema informático había sido dispuesta por Ricardo Echegaray, titular del organismo, y estaría orientada a que los importadores demuestren que no realizan giros encubiertos de divisas.

Cerca de 200 importadores y despachantes reclamaron en la Aduana, mientras el subdirector de Control explicaba los pasos a seguir.

Despachantes que fueron a reclamar explicaron que en los certificados de importación ya hay que dejar constancia a través de qué banco se realiza el pago de las mercaderías, por lo cual los nuevos requerimientos dilatarían los tiempos de ingreso y, virtualmente, la salida de dólares.
Los importadores y despachantes que fueron a reclamar se autoconvocaron en la Aduana con ayuda de una publicación del sector. La cúpula directiva del Centro de Despachantes de Aduana, que habitualmente oficia de interlocutor, se encuentra por estos momentos en Brasil en actividades institucionales.
La orden que se había emitido a través del SIM dejaba múltiples zonas grises, dado que habían quedado bloqueados los ingresos de productos no onerosos (donaciones); combustibles y material sensible, como los medicamentos, o perecedero, como alimentos.

El monitoreo del proceso está a cargo de Minisini, un hombre cercano a la conducción de la AFIP, que llegó a su cargo desde Santa Cruz, luego de que en julio de 2010 Echegaray echó a Silvana Tirabassi, quien era directora general de Aduanas. Desde la subdirección de este funcionario se controló con rigor la aplicación de licencias no automáticas en febrero de este año, que ponían un barrera al ingreso de automóviles de alta gama.

El Sistema María frenó este miércoles importaciones y empezó a requerir documentación bancaria.

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